Suena la música de fondo en la noche más fría de agosto. Un bar cualquiera, en una esquina cualquiera. Mesitas de lata y un toldito de lona para cubrir del frío. Ellos sentados frente a frente charlado de viejas historias, de travesuras adolescentes, de secretos inconfesables. Se miran, ríen, hacen bromas, se sonrojan. Se desean.-
- "Que pasa..? Te quedaste callado..." - Dice ella en un minuto de silencio.-
- "Nada. Te miro. Me gusta mirarte..." - Le responde él.-
Ella ríe nerviosa sintiendo un calor subir desde su vientre. Tanto años y aun se estremece como el primer día. Instantes de silencio donde se comen con las miradas. Ella canta a voz baja el tema de fondo, sabe que es su banda favorita. El sigue mirándola como el primer día, pero conociendo de memoria sus rincones.-
- "Vamos..." - Le dice, mientras la toma de la cintura. Ella camina a su lado segura de no caer...
"No hay ni una sola historia de amor real que tenga final feliz.
Si es amor, no tendrá final. Y si lo tiene, no será feliz..."
Joaquín Sabina
